A continuación vamos a establecer las que, bajo nuestro punto de vista, son las semejanzas que existen entre la escuela de la película y las escuelas que existen en nuestro entorno más cercano:
Para empezar, los niños estan muy unidos y esto puede deberse a que, aquí, como en la vida real se esmeran por aprender juntos de forma cooperativa sin intención de competir. Esto hace que los unos se ayuden a los otros y de esa manera se ven envueltos en un ambiente que propicia la amistad.
En cuanto al aula en sí, también encontramos semejanzas con las escuelas reales. Principalmente, lo que se pretende mediante tantos adornos coloridos y tantos juguetes es que los niños aprendan de forma alegre y amena, mediante el juego sobre todo.
Se emplean otras tecnicas a parte de la del juego, como el uso de canciones para facilitar la asimilación de los conocimientos. Además, se crean hábitos de conducta que de forma indirecta inculca en los niños una serie de normas y pautas de conducta que les valdrán para convertirse en personas cívicas en la sociedad en la que más tarde tendrán que desenvolverse solos.
Respecto al maestro, es una persona idonea para ejercer la enseñanza en niños de tan corta edad, debido a que a estas edades es primordial un trato cariñoso y muy cercano. La figura del maestro en la película es casi como la de un padre y esto es lo que sucede en la vida real, en las escuelas donde los educadores imparten sus clases casi de una manera familiar y, repetimos lo anterior, muy cercana.
En general, en la película se refleja la realidad educativa existente en la sociedad real.
Derecho al Delirio
Hace 15 años
